domingo, septiembre 30, 2007

Baby Steps

* (Primero que todo, te agradezco por el título de esto que escribo. ;) Tú sabes...)

Durante los últimos días, en los cuales (¡qué sincronía!), he sentido profundos estados emocionales que no me tenían bien, el Universo se alinea para mostrarme un poco más de lo que soy. Más de lo que soy en esencia, no sólo las cosas que hago o las decisiones que tomo.

Tuve la oportunidad de contactarme con algunas instancias que me provocan estas emociones que me tenían mal. Afortunadamente, también tuve la instancia de integrarme a un espacio de crecimiento y desarrollo personal, que me ayudó a observarme (acompañado por hermosos compañeros de camino: ¡¡Gracias Felipe, Cristián, Rodrigo, Marcelo!!) (Seminario de Robert Dilts y Deborah Bacon: "Coaching a nivel de Identidad")

Pude aprender varias cosas de mí.

Aprendí, por ejemplo, que tenía la creencia, en mis relaciones interpersonales, que si no estaba mal, sufriendo, pasando malos ratos, la gente no se acercaba a mí...pensaba que los otros pensaban: "ahh..si está bien, para qué me voy a acercar"...y eso me ponía en una posicion de víctima respecto a las cosas que me pasaban...buscaba mantener en mí algunos estados emocionales negativos, para sentir cerca a la gente que quiero.

Aprendí también, que no me gustaba dejar de sentir pena o tristeza. No me gustaba, porque al sentir pena o tristeza, podía ponerme en mi rol de víctima e iba a mantener a la gente que quiero cerca de mí.

Me di cuenta que hay otras formas de mantenerlos cerca; por ejemplo, irrandiando cosas positivas. Me di cuenta que, pudiendo transformarme en una antorcha (símbolo que he encontrado en mi interior repetidamente en los últimos días) No tengo que ser un estropajo para tener cerca a las personas que quiero (¡sí, tú!), sino que puedo tenerlas cerca por lo valioso que soy en el aquí y en el ahora.
Descubri que puedo tenerlas cerca por iluminar y no sólo porque tengan que recogerme del suelo...
Puedo tenerlas cerca por lo valioso que soy en cada momento presente, sin las culpas, los juicios y las penas del pasado, y sin la incertidumbre y los miedos del futuro.



Me di cuenta que estoy aprendiendo a soltar y dejar ir las situaciones en las que no puedo hacer nada más y que eso no me hace ser débil ni menos, sino que me muestra toda la valentía, entrega y transparencia que fui capaz de sacar de mí y entregar a cada persona a la que he querido o amado, a pesar de las circunstancias.

Aprendí, también, que en relaciones que me causan mucha pena o tristeza y en las cuales me siento devorado o inundado por mis sensaciones, no soy capaz de irradiar lo que soy aquí y ahora, sino que comienzo a proyectar mis creencias limitantes en relación a mi pasado y a mi futuro.

(Estoy dándome la bienvenida a vivir mi propia vida y no vivir la vida de los demás...o dejar que otros vivan mi propia vida)

Me di cuenta, que, en estados de centramiento logro encontrar un espacio alrededor mío (como una cápsula o una cerca) que me permite darme mi espacio para entregar lo que soy, y no lo que fuí o lo que debería ser.
Me di cuenta, que la forma más eficaz que tengo de centrarme es sonriendo. y sonreír me permite entregarme tal como soy. Entregar lo valioso que soy.



Aprendí más de mí...

Me di cuenta que cuando llego a nuevas situaciones con la actitud de "esto me lo se, soy seco en esto, no tengo mucho que aprender o esto lo hago sin ningún problema", me es más fácil perder el centro y que me salga mal...en cambio, cuando llego con la actitud de "a ver, qué puedo aprender de esto", o "con qué maestro me voy a encontrar, disfrazado de vendedor, de garzona, de vendedor del quiosco, o del mcdonald's?", llego mas centrado y me salen mejor las cosas

Es lindo sentir que el vaso no está ni medio lleno, ni medio vacío, sino que el vaso se está llenando.

8 comentarios:

Gianfranco TR dijo...

Estimado Rai:

No me sorprendes, debo decirte. A lo largo del tiempo que te he conocido, me he dado cuenta de que en mi ha habido una sensación que dice algo como "este tipo es seco pero en alguna parte esta teniendo un techo". Nunca profundice más en eso porque quizas no sentía tanta confianza como ahora siento contigo. Pero mi intuición de tu techo creo que iba por donde tú has encontrado aprendizajes nuevos. En esta línea, acabas de romper el techo y construiste un piso para tu aprendizaje.

Genial la analogía del vaso que se llena. No será que a llenar vasos venimos? Y como profesionales psicologos no es parte de nuestra misión ayudar a otros a llenar los suyos? Genial analogía, me diste tremendo espacio para pensar.

Otra cosa. No te recuerdo por ninguna vez que hayas sido victima o victima, se se quiere decir así. Te recuerdo por enseñarme, ayudarme, abrirme camino, escucharme, estar conmigo cuando lo necesité y ser uno de los pocos que han sabido comprender mi forma de sentir respecto de tú sabes quien. Yo te quiero por eso y te recuerdo así. Por otra parte, lamento no sentir que te he sido igual de util amigo.

Respecto de tu centro debo decir que de todas las formas habidas para centrarte, a mi juicio, escogiste la mejor... una sonrisa. Estudios dicen que la sonrisa ayuda a los niños a soportar mejor el dolor de las enfermedades; cómo no nos va a ayudar a centrarnos. Hoy vi la pelicula "El duelo". En una parte, el protagonista chino conversaba con su contraparte japonesa sobre el té. El japones decía que habían muchos tipos de té dependiendo de sus grados. El chino dijo, que no le gustaba catergorizar así a las cosas. El té no se juzga a si mismo, nosotros lo juzgamos a él. Además, cuado estas de buen animo (con una sonrisa!) el grado del té no te importa. Bella tal distinción. Hay mucho que aprender del mundo oriental.

Bueno espero haberte aportado y no haberte aburrido con la extensión.

Un saludo y salud! por un destino tan grande... tan grande como queramos.

Bye

Felipe Landaeta dijo...

Que grande RAI...

Un orgullo estar presente y caminar contigo esta parte del camino.

Estuvo muy emocionante el taller con BOB y WANDA o RHONDA...jajaja

Creo que estai en un camino ascendente heavy, y lo más bakán es que esto es una cordada, vamos todos ascendiendo y compartiendo aprendizaje los unos de los otros.

Creo que así vamos a cambiar el mundo (al menos el interno).

Felicidades.

Juan Pablo Gevert dijo...

Notable.

Ya está conversado, pero sólo quisiera agregar que, a partir de mi experiencia, no hay mejor aprendizaje que mirar lo que viene desde la humildad, pues la única forma de abrir y abrirse posibilidades.

Un gran abrazo, amigo.

JP

PD: ¿Me puedo incluir en el club de los cambiadores del mundo?

Karen Araneda dijo...

Raimundillo!
...ya habíamos conversado hace un rato, pero igual quiero decirte lo mucho que me alegra ver los saltos que estás dando en tu vida. Tengo la sensación que estás ampliando con creces la conciencia que tienes de ti mismo..como que te estuvieras encontrando con nuevos aspectos tuyos...y te veo mirándote con amor, aceptación y gratitud...y que lindo es mirarse y mirar a los demás desde ahí!

Mi más sincera admiración por todo lo que estás logrando en tu vida...

Te mando muchos cariños!!

Karen.

P.D: ah y aprovecho de decirte que también me sumé al mundo de los bloggers :)

Ignacio Fernández Reyes dijo...

Me impresiona tu capacidad de sentir, pero me sorprende mucho más tu talento para hacer distinciones sutiles y de ponerlas en palabras.

En varias ocasiones he usado un lenguaje más bien alternativo, eso de lo que Forni desconfia cuando dice que "no cree en luces ni esas cosas". Bueno. Voy a tomar tus palabras. Si te sientes antorcha es, a mi modo de ver, contactar con la esencia creadora de todo, el fuego, por lo que tú simbolismo de antorcha es de una profundidad certera.

Ese "espacio alrededor mio (como una cápsula o una cerca)" me permito refrasearlo como el tubo de luz que permanentemente nos rodea, donde está el "espacio vital" (tomando las palabras de Felipe) y se vive en completa autenticidad (tomando las palabras de Karen).

Cuando el fuego vibra a una tasa alta se ve como luz. Capaz que la Fresia Castro no haya estado tan extraviada.

Sobre lo del rol de víctima, me llega de un modo diferente y comparto lo dicho por Gianfranco: yo al menos no te noté nunca en esa postura. Más bien diría que en una actitud algo condescendiente contigo mismo y que la mostraban, generabas mayor impacto en los otros. Pero de ahí a vincularte desde la victimización, creo que hay un trecho grande.

No sé quien tiene que decretar a los cambiadores del mundo. Haciendo cuentas, está Felipe, Raimundo, Forni y yo me sumo. Cmo dice una canción: "vos, yo, 1 + 1 = 5).

O como dice el último posto del blog MPO, nuestras notas personales continuan creando una sinfonía.......aunque ahora es diferente: es cada vez con más conciencia de cada uno de nosotros.

Mali dijo...

Amigo, que te puedo decir, siento que estamos compartienod un mismo camino desde experiencias distintas...La vida nos reune y nos deja la oportunidad de acompañarnos para no sentir que estamos solos.
Desde mi profundo cariño y pq tú lo sabes y si no te lo repito...no estás solo en esto, estamos y estoy para cuanod quieras que esté.

Vamos a andar a la verdad, a la vida!

Un gran beso y te felicito por tu cambio y encuentro con tu descubrimiento.

Cariños,

Mali

Tanja dijo...

Hola!

Ya que abres aquí un espacio a la reflexión y al diálogo, me permito hacerte una sugerencia en esa línea. En tu perfil describes:

"Algún día, en algún lugar, alguien encontrará esta cápsula y entonces comprenderá... Comprenderá los pasos que he vivido y como, experiencialmente, éstos me afectan."

Los pasos te influyen, más que afectan. Algunos afectan, pero los últimos, por lo que te "leo", te han ayudado a crecer. Decrétalo así también para tu vida. Que "los pasos" no te afecten, que te potencien!!!

Saludos y ¡sigue adelante!!!

Raimundo C. dijo...

¡Gracias, muchas gracias, Tanja!