En general, prefiero mirar las cosas desde la positividad. En circunstancias normales, a este artículo le habría llamado "¿Cómo retener su talento?" o algo similar.
Sin embargo, esto pretende ser un relato de la realidad más que un intento por cambiarla. Hay momentos en que ni las escasas fuerzas ni la decreciente motivación alcanzan.
Todo parte desde el liderazgo; es absolutamente clave.
Por eso, si usted necesita o quiere perder un talento de su equipo, tiene todo para hacerlo. Comience generando objetivos poco claros y además, alejados del negocio. Preocupese que todas sus iniciativas estén enfocadas en satisfacer nimiedades y deje de lado el aporte de valor. RRHH no está para eso.
Acá tiene su gran principio: Un área de RRHH es absolutamente incapaz de generar valor agregado, por lo que debemos dedicarnos a administrar con eficacia. Si ve algún atisbo de generación de valor, interrúmpalo, córtelo, antes que pueda despegar.
Para lograr esto, le ayudará mucho conformar un equipo similar a sus características. Productivo, pero sin energía. Eficaz, pero sin niguna capacidad de agregar valor. Forme un equipo simplemente cumplidor.
Siguiendo esta línea, transforme en burocrático, todos los procesos que antes funcionaban limpiamente y transforme en administrativos todos los procesos que, con esfuerzo de sus talentos, habían llegado a ser valiosos para la empresa.
Tenga un sistema de compensaciones poco equitativo. Si puede, páguele más a la gente que está transformando magistralmente el área de RRHH en lo que usted busca: Un área sin peso estratégico, pero extremadamente cumplidora.
Eso si, que no se vaya a enterar la gente que le agrega valor, porque ellos (tan egocéntricos como siempre) piensan que deberían ganar al menos lo mismo que ese excelente experto administrativo.
Mantenga su pensamiento que lo ha llevado hasta donde está: El trabajo clave y relevante de su equipo sólo lo pueden realizar sentados en su escritorio. Para qué perder tanto tiempo en reuniones, sobre todo con los gerentes de otras áreas. La reuniones de la gente de su equipo sólo pueden ser largas cuando se están solucionando aquellos problemas claves para la productividad: Nóminas, fechas, construcción de una presentación en power point. Que a nadie de su equipo se le ocurra andar perdiendo su tiempo en conversaciones acerca de la estrategia con gerentes de otras áreas. Aún menos, les dé permiso para viajar cuando se trata de proyectos importantes...Sus talentos son irremplazables en su escritorio, contestando el teléfono y los mails, pero en otras regiones del país donde se quiere implementar el proyecto que él lleva a cabo, ahí sí que es reemplazable.
Como detalle final: Si por casualidad pertenece a un Grupo o un Holding, escriba en su firma de los correos electrónicos el nombre de una sola de las empresas, ojalá aquella que no sea la principal cartera de su talento.
No es díficil. Siga este pequeño manual y seguramente logrará construir el área de RRHH que está buscando en un corto plazo...Recuerde que el talento tiene esa extraña capacidad de encontrar siempre nuevas opciones en otros lados donde aquel líder absurdo quiera retenerlo.
jueves, febrero 05, 2009
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